Con orgullo te oigo respirar,
y me imagino a tu lado,
respirando boca con boca,
al mismo ritmo,
siguiendo los mismos impulsos del corazón.
Con paciencia te escucho respirar,
te adivino dormida,
relajada, y relajado también tu cuerpo,
casi puedo presentir como palpita tu piel,
y me estremezco, y me muero de ganas de abrazarte.
Con una sonrisa en los labios te veo respirar
al cerrar los ojos;
con música siempre de fondo
que no se atreve a alterar tu sueño,
tus dulces sueños que se cumplirán a mi lado.
Y deseo ser ese aire, ese aire que penetra por tu cuerpo,
ese aire que recorre tu piel,
ese aire que acaricia tu boca, tus mejillas,
tu pelo…
En fin… nada, una pequeña brisa…
Pero que pasea ahora tan cerca de ti…
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