Sin pajaritos ni florecitas, sin versos, sin rima, me desnudo, descubro y abro para ti. Desde hace años deseo formar una familia, tener un hogar levantado desde el cariño y el amor, y hasta encontrarte, he luchado por ello y renunciado más de una vez. En alguna ocasión pensé que jamás llegaría a cumplir ése, mi sueño, me veía como un poeta, avocado al fracaso, a estar solo e inspirarme en esa soledad que tanto me ha acompañado. Cierto es que no siempre he estado solo, mas nadie me ha llenado como tú, nadie deseaba lo que deseo yo tanto. Y así llegaste tú, tal cual eres, tan diferente y única, me impactó tu forma de ser y hacer, me chocó, me gustó, me atrajo, hasta llegar a donde estamos ahora, ya nada puede separarnos, pues yo no quiero separarme de ti, ni tú de mí, ni yo permitiré que nada nos separé jamás. Tú me has devuelto la vida, mi verdadero sueño, todas mis ilusiones. Tú me llenas por completo, sólo tú, aunque ahora mismo no estés aquí, te respeto desde que te conocí, te amo y te soy fiel como si estuvieras, pues te llevo en el corazón, y te considero un regalo del cielo, mi chica, mi esposa, mi verdadero amor.
Te quiero, Patricia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario